Digo yo

Van 4 fechas.

Todos jugaron 4 partidos o casi todos.

Y esto no parece suficiente para sacar alguna conclusión que permita evaluar cómo o a qué juega cada equipo. Ni cuál es mejor o peor.
La falta de consecuencia en el funcionamiento en lo que va de un partido a otro, la falta de constancia en el juego es quizás el más importante, sino el único, factor común entre los equipos.
¿Cómo puede explicarse que el Vélez que a justo juicio casi general era el mejor equipo local, evaluado desde la reconocida y casi exclusiva capacidad de "jugar a algo" haya sido superado claramente en el manejo del partido por Boca? El Boca desabrido de las últimas semanas.
Hoy, los especialistas, explicarán que la actitud y las ganas de los jugadores de Boca marcaron la diferencia y sólo estarán dándole una excusa mas esotérica que futbolera al fracaso velezano.
Si fuera actitud solo lo que le faltó a Boca en las fechas anteriores o si fuera actitud lo que le sobro ayer, la receta para solucionar las últimas campañas de casi todos habría estado más cerca de la contratación de un sicólogo o algún experto en desarrollo del carácter que en cambiar el DT.
No hay actitud que valga si no se aciertan dos pases seguidos y en eso fallaban los de Boca hasta ayer. En eso fallaron los de Velez.
Ni tampoco existen ganas capaces de compensar la falta de clase. Sino vean a los miles de tipos que cada día juegan al futbol en ligas menores, en torneos amateurs, sin cobrar o cobrando poco, sostenidos solamente en su amor al juego. Lo único que los hace salir a la cancha son las ganas y sin embargo juegan mayormente feo y mal.

Boca le gano a Vélez porque jugó mejor.

Porque Clemente fue y vino mucho mejor y más que Papa, porque Chavez jugó mejor en equipo y en la individual que Morales. Porque Viatri estableció una diferencia notable con el publicitado Burrito Martinez. Porque los 3 del fondo de Boca marcaron mejor que los 4 de Vélez.
Es una tontera quedarse con la explicación de las ganas, de la actitud, cuando el cambio fue en la calidad del juego que desplegaron los jugadores.
Boca acertó en los pases, en las marcas, armo alguna jugada y eso generó entusiasmo, afuera y adentro, cambió el ánimo y metió ganas.

Al revés no es posible.

Con entusiasmo y actitud no se arman jugadas ni se maneja un partido.

A lo sumo se aguanta o se acierta algún centro y se puede hacer algún gol.
Eso que muchos dicen que jugando bien las posibilidades de ganar aumenta, Boca lo demostró ayer.

San Lorenzo, este SLA de Ramon Diaz es al fútbol lo que el menemismo a la política.
Pragmatismo cruel y descarado, sin vergüenza ni pudor por hacer lo que cree que debe hacer o que se le canta hacer.

Tan pragmático como para salir con Aureliano Torres de enganche o poner de 9 a un tronco, nulo para cualquier otra cosa que no sea cabecear centros.
Le alcanzó para ganarle malamente a Racing y le gano bien a All Boys con dos cabezazos en un área donde Palermo una semana atrás no gano ni una, calificando la actualidad del goleador histórico de Boca.

Racing perdió bien con Olimpo en una cancha donde, como en AAAJ se juega una variante "flipeada" del futbol profesional.

Una cancha donde los defensores si la despejan "fuerte, alto y lejos " generan un ataque propio.

Una cancha donde la práctica en "espacios reducidos" dura 90 minutos y donde el local presenta un equipo del ascenso, con estilo y propuesta de esa categoría.
Pelea, marca, fricción, despliegue y voluntad.
¿Juego coordinado? Nada.
No hay forma de jugar bien en esas condiciones.
Si de un lado están Moreno, Toranzo, Bieler, Luguercio tratando de parar el futbol y armar algún intento de jugada y enfrente 11 voluntades para que no lo logren, la cosa es difícil que prospere.

Al menos en lo futbolístico es difícil.

A la tarde el CAI perdió con un típico equipo modelo Alfaro, Falcioni, Llop o Carusso Técnicos aptos para armar equipitos ordenados, con jugadores aceptables y que aprovechan hasta la última moneda que rascan en el bolsillo. No te regalan nada y cuando te descuidas te "distraen" lo que tenías.
¿Qué hay de diferente entre este CAI de Garnero y el reputadisimo CLM y el del Tolo?
De afuera solo se nota que el arquero ya no aguanta los partidos en los que el equipo no juega o juega mal.
Peor aún, ahora ataja mal.
Ayer pareció flojo en ambos goles y en lo que va del torneo se le vieron fallas que no tuvo en el ciclo del Tolo, donde sostuvo más de un resultado.
Mientras tanto el resto del equipo es igual de regular y falto de juego que el del semestre anterior, aun cuando los resultados son peores.

Tigre goleo a Quilmes y quien no vio el partido podrá pensar en un despliegue futbolero notable de los de Carusso.

Nada de eso.

Tuvo 20 minutos iniciales donde hizo un gol y erro otros 4 , después fue el mismo Tigre picapiedra de siempre, regalándole la pelota a un Quilmes que tiene tanta peligrosidad como un revolver a cebita.
Quilmes dominó, bah! tuvo la pelota, de los 20'del 1T hasta el 2do gol de Tigre y cuesta encontrar algún momento donde pudo estar cerca del empate.

River jugó como lo venía haciendo, bien desde las intenciones, mal desde el resultado conseguido, resultado en juego.

Se sostiene en algún chispazo de alguno de sus jugadores.

Bajísimo (Je) Buonanotte, la creación queda en manos de pibes sin rodaje o de Ortega, con kilometraje excesivo.

Contrariamente a lo que proclamaban los simplones, Cappa está consolidando la defensa y tratando de sostener el arco propio. Esta afirmación no intenta tildar de defensivo el juego de River, sino más bien establecer que siempre, siempre, el buen juego de ataque, de manejo de la pelota, se sostiene si en el área y en el arco arco propio juegan bien.
No hay intención futbolera que soporte que cada avance rival sea gol.

Cappa lo sabe tanto como cualquiera con la diferencia que en ese cuidado no compromete a los 11, sino a los que debe comprometer.

De todos modos lo de River, si bien anda pasable en los resultados, parece tener poco alcance en tanto no mejore en el juego.

El resto de los equipos son más de lo mismo, donde sobresale Colón, el siempre precandidato, que esta jugando mal y perdiendo peor. Por supuesto, el conventillo mediático futbolístico ya dejó trascender que Mohamed anda mal con el plantel, insinuando que los jugadores están “yendo para atrás”.

Así estamos en nuestro torneo local, donde el aire fresco que pareció dejar entrar el raje de TyC y la llegada del Futbol para Todos se transformó en este olor a naftalina podrida que emanan los relatos de Marcelo Araujo con comentarios de Julio Ricardo y notas de Fernandez y Benedetto. Y donde los domingos post partidos al tradicional e insoportable Futbol de Primera con Macaya lo reemplazó el cabaret Show del Fútbol, regenteado por Fantino, con los aportes barrabravas de Ruggeri e ideologizado por Rossi y Passman.
Todo peor.
Salute