Pedí un deseo

Hoy empieza un nuevo torneo. Y es de fútbol, aunque todo lo que lo rodea pareciera desmentirlo. Esperemos que los vientos que soplen desde las canchas logren llevarse todo el bochorno mediático de este último año y medio de disparates.

La sobreactuada ruptura de la AFA con su socio y cómplice en el robo durante años del fútbol televisado y la poco creíble falta de intencionalidad política de la compra de las transmisiones por parte del gobierno.
Las deplorables campañas que los equipos con más hinchas y el advenimiento de campeones y ascensos de clubes impensados o de escala casi barrial.
La inescrupulosa designación de Maradona como DT de la selección, motorizada en la confabulación de algunos pseudo-periodistas y el mismo involucrado, para desestabilizar y derrocar a Basile.
Las goleadas oprobiosas que recibió el equipo, integrado por jugadores de elite y las peleas burdelescas entre Bilardo, Maradona, Grondona y otros personajes que si no se supieran reales pasarían por inventos de folletín.
La no renovación de Maradona como DT, su repostulación por sus voceros mediáticos pagos, la sucesión de nombres desde Batista hasta Bianchi, pasando por Simeone, Diaz y Russo hace temer por nuevos y peores fracasos futboleros, no solo desde los resultados sino también desde el manejo.
Técnicos que se postulan, periodistas que postulan técnicos, operaciones de prensa para desprestigiar a competidores.
Periodismo vendido, periodistas comprados.

River, que expulsó a Aguilar uno de los mas desfachatados dirigentes de la historia, dejando el manejo en manos de Passarela que, de modo sorprendente y poco claro hasta ahora, gasta en niveles contradictorios con la autdeclarada situación crítica de sus finanzas.
Gasta y no queda claro de dónde saca o sacará la plata si los resultados no lo ayudan.La pregunta de siempre¿quién pagará la fiesta?

Boca, que dispone de dinero por ventas impensadas para su más reciente actualidad deportiva, está sumido en una interna miserable entre los seguidores de la política pragmática y elitista del mediocre ex presidente, que piensa al club como una S.A. (o hace que piensa, por que las ideas parecen extravagancia en su persona ) y algunos dirigentes tradicionales, que empiezan a asomar nuevamente pasados los años dorados del macrismo liberal .
Cualquier parecido con el país, no es casual.
El campo de batalla de esta interna que ha sido el manoseo de la situación de Riquelme , metido en el medio por la incondicional defensa que de él hacen la absoluta mayoría de hinchas y socios, cosa que no toleran ni termina de digerir la comparsa de macri y menos aún el hijo sonso de Franco.

San Lorenzo, que es un espejo donde debiera mirarse River, está en la era post Tinelli. Época donde apareció plata, vinieron jugadores, se gastó sin preguntar, se ganó algún título consolador pero el club quedó diezmado y todavía no se ve bien dónde irá a parar el desbarranco aunque tememos que ya se sabe "quién pagará esta fiesta"

Racing es, en el contexto de este desmadre generalizado en el fútbol, el que parece transitar con una hoja de ruta más clara que el resto.
O al menos parece tener un plan, un norte. Después del delirio carusiano, está comprando en forma más pensada y con cierta proyección. La pregunta sigue siendo la misma ¿de dónde sale la plata para compras y pago de sueldos de niveles internacionales (Moreno, Bieler, Ayala) en un club que se declaraba fundido y endeudado hace 10 o 12 meses?

Independiente ha aceitado muy bien los canales mediáticos para tapar situaciones que a otros clubes les costaría primeras planas y letras catástrofe.
El despido, sin más ni más, del Tolo mereció la décima parte de los comentarios, opiniones y críticas que generó el despido de Russo de Boca, al que se sigue mencionando como “inexplicable” cada vez que se habla del DT del comedor brillante.
Nadie nunca habló del contrato de Menotti ni las cifras, mientras que de Bianchi se supo hasta los decimales.
Tampoco se objeta en ningún medio que Menotti Jr. maneje un negocio similar al de Bianchi Jr. y también trafique jugadores con el club donde su padre ejerce, situación que los medios se encargaron en descalificar en Boca.
Lanús, club sindicado como modelo y semillero de jugadores contrata un 10 de 31 años, uruguayo más cerca del retiro que del profesionalismo.
Vélez liquida delanteros que amontonó en el otro semestre.Quilmes contrata 19 jugadores, Tigre 16...
Gino Clara y Ormeño no fichan hasta ahora en ningún club por un pacto entre dirigentes que habla de no contratar jugadores que se vayan en conflicto con el club anterior.
Por ahora, hasta que algún dirigente traicione el acuerdo y los contrate.

Los árbitros, ahora conducidos por Lamolina, discutible referí reemplazante de Romo al que ni siquiera podía discutirse, se sortean para algunos partidos y se digitan en otros en una disparidad inexplicable.

La discusión hasta el hartazgo de detalles del contrato de Riquelme, diseccionado periodisticamente en cifras y cuestionado hasta en el pago del sellado frente al silencio absluto y nula difusión del contrato de Palermo, con 37 años y un presente más que dudoso en capacidad y potencial, pero casual y oportunamente representado por un ex-periodista, Goñi.

La policía que lejos de promover y auspiciar la reducción de los problemas de seguridad, los potencia porque su negocio está en que todo siga igual.
Anibal Fernandez asumiendo como Vice de QAC agregando sospecha desde la promiscuidad de los cargos que ocupa y las responsabilidades y atribuciones asociadas.

Todo muy embarrado, todo muy toqueteado y manipulado.
“En el mismo lodo, todos manoseaos”.

¿Y de fútbol cuando hablamos?
Así nunca.

Ojalá el fútbol, los jugadores, el juego ventile tanto olor a podrido, tanta miserabilidad amontonada y expuesta. Ojalá Buonanotte, Ortega, Toranzo, Giovani, Gracian, Morales, y todos los jugadores entiendan que si ellos no lo salvan, si ellos no le dan oxígeno con su juego, con sus toques, el fútbol seguirá en manos de los mismos.
Son ellos los que deben instalarnos nuevamente en la discusion futbolera, dejar el chismerío y los lamentos, las excusas y la sanata. Hablar con los pies en los 90 minutos y darnos tema a nosotros para hablar el resto del tiempo.

Si los que juegan no nos convocan a los hinchas desde la estética y el estilo, si el discurso sigue proponiendo ir al teatro para ver espectáculo en vez de ir a una cancha, el negocio, la ventajeada, la trampa, el resultado, las traiciones, la política y los mercaderes finalmente se habrán adueñado del fútbol definitiva e irremediablemente.
Esto, en caso de que ya no lo hayan hecho.

Ojalá el fútbol nos salve.